Tras la negativa de la devolución de las llamadas, el mismo Emanuel se hizo presente en su casa en el automóvil Audi A4, junto con Cristina Almeida, y tras decirle que tenían trabajo le ordenó que abordara el vehículo, y salieron de la ciudad.
En este trayecto hasta la zona rural, Emanuel en todo momento le iba advirtiendo al nuevo testigo que los tres estaban en esto, a lo que preguntó de qué se trataba, por lo que le dijo entre balbuceos, porque no le entendía bien, según el testigo.
Solamente decía en todo el trayecto, hasta que llegaron nuevamente al lugar del crimen de Leonela: "Le pegué un tiro en el pecho", y repetía eso continuamente, hasta que descendió del automóvil y buscaban cosas alrededor del cuerpo de Leonela que estaba tendida muerta en el piso ya desde hacía varias horas, según su declaración.