Este sorprendente giro en la causa encendió todas las alarmas en el círculo cercano de Lowrdez, ya que podría implicar la inminente liberación de Leandro García Gómez en las próximas horas, a pesar de las graves acusaciones iniciales. Este desenlace ya había sido anticipado por el propio entorno de la artista.
El día que Lourdes fue trasladada en ambulancia desde la casa de Leandro, ella misma confesó a las enfermeras que su expareja la había amenazado directamente. Según trascendió en su momento, García Gómez "me dijo que me iba a mandar a matar" y que le haría daño a ella y a sus hijos si llegaba a declarar en su contra, una amenaza que habría influido en su postura ante la Justicia.
A la amenaza de muerte se suma un fuerte elemento de presión, ya que Lourdes estaría siendo extorsionada por su expareja con imágenes íntimas. Mientras tanto, Leandro García Gómez se negó a declarar en el ámbito judicial, aunque sostuvo que la cantante "vino a su casa por voluntad propia", que "no la lastimó" y que ella "no quería salir ni ver a su madre". Cabe recordar que el hombre ya había mentido a los medios sobre el paradero de la cantante, asegurando que estaba "en provincia en la casa de una amiga".