Además de la exclusión, el organismo aplicó una dura sanción disciplinaria: Independiente deberá disputar sus próximos 14 partidos organizados por Conmebol sin público. Esto incluye jugar a puertas cerradas cuando actúe como local y sin la presencia de su hinchada cuando lo haga en condición de visitante.
En el plano económico, la Conmebol le impuso al club argentino una multa de 150.000 dólares, que será descontada de los ingresos por derechos de televisión o patrocinio, y otra de 100.000 dólares por infracciones al Código Disciplinario.
La Universidad de Chile también fue sancionada: deberá jugar 14 partidos sin público (7 de local y 7 de visitante), pagar una multa de 150.000 dólares y otra de 120.000 dólares por infracciones al Código Disciplinario.
Además, ambos clubes están obligados a realizar campañas contra el racismo, la discriminación y la violencia. En su próximo partido como local deberán exhibir un cartel con esa consigna durante el protocolo de inicio, y publicar en sus redes sociales mensajes con el mismo lema durante los tres días previos al encuentro, bajo supervisión de la Conmebol.